Jennifer Aniston es una de esas actrices con el llamado one hit wonder detrás. De no ser nadie a convertirse en su personaje, en Rachel Green, aquella guapa mujer que se iba a casar con un rico a quien no quería y cuya cabeza estaba tan vacía como lleno su armario; luego hizo el cambio radical y descubrió el mundo. Su mundo. De ‘Friends‘, hace ya nueve años, a convertirse en una de las actrices con peor gusto a la hora de escoger guiones. La carrera de Jennifer Aniston no es tal, sino la de su doble, Rachel Green.

Tenga veinte o más de cuarenta años, como tiene ahora, Jennifer Aniston seguirá siendo Rachel Green y seguirá jugando a provocar en cada papel. A cada año que pasa, esta provocación va en descenso hacia lo más zafio. Antes, en ‘Friends’, jugaba a ser una ejecutiva atractiva bajo alguna firma de moda como Ralph Lauren cumpliendo otro tópico asociado a su personaje. Ahora ya pasa a ser una dentista acosadora que busca tirarse a su ayudante en ‘Cómo acabar con tu jefe‘. Las escenas que se han filtrado de su próxima película (que vemos en el post), ‘We’re the Millers‘, parecen anunciar un nuevo salto cualitativo en su carrera. Ahora es una stripper.

Todo este proceso lo ha hecho con el ADN de Rachel Green. Físico espectacular, de apariencia boba, deseada por muchos (ahora es cuando surge el debate si Mónica o Rachel; yo era de Mónica) y con un tío, por lo general, bonachón (o bobo directamente) a su lado queriendo conquistar a la animadora más sexy de la universidad.

Jennifer Aniston ha vivido tres décadas como Rachel Green y le ha funcionado muy bien. Puede compartir con Jennifer Love Hewitt una carrera llena de matices en el plano interpretativo.

En 1001 Experiencias | Sofía Vergara, la arma letal latina
En 1001 Experiencias | Scarlett Johansson, el talento del blockbuster mejor pagado