Bueno, bonito y barato. Es la regla de mucha gente a la hora de decidirse a probar cosas nuevas, y sobre todo para muchos si hay que levantarse del sofá. Otros buscan nuevas sensaciones, nuevas experiencias, cosas que quizás siempre han estado ahí pero nunca nos hemos decidido a probar por algún motivo. Pero nunca es tarde para salir a la calle a probar nuevos deportes urbanos. Hoy te traemos una selección de cinco cosas bastante entretenidas que probar en tu ciudad.

Rollerblade, la libertad del movimiento urbano

O también conocido como patinaje en línea. Es mucho más que patinar de forma tradicional, puesto que vas sustentado por cuatro ruedas, pero en línea y no en paralelo. Eso te permite hacer distintos tipos de giros y movimientos bastante entretenidos, aunque conviene saber frenar pronto porque puedes alcanzar una velocidad incontrolada rápidamente.

Es igual para practicar en pareja o con amigos, e incluso si quieres dar un paso adelante y te atreves con un punto de aventura, puedes probar a saltar obstáculos o aprender algunos trucos en los skateparks. Divertido y económico, puesto que puedes practicarlo por cualquier calle de la ciudad, aunque lo ideal es un espacio abierto.

Tándem, paseando en pareja

Si el roller es divertido en pareja, el deporte ideal para ello es sin duda el tándem. La mítica bicicleta para dos. Lo importante es saber coordinarte con tu pareja, o ir especialmente rápido y saber tomar las curvas con control. Por lo demás, es una divertida variante del ciclismo que te permitirá recorrer parques, carreteras de bosque, paseos marítimos y sitios para disfrutar de dos en dos sin perderte un sólo detalle del paisaje.

Eso sí, olvídate de subir cuestas demasiado inclinadas o se convertirá en un deporte de entrenamiento. Lo ideal para un tándem es una superficie plana.

Longboard, hambre de olas

Si buscas algo más individual y tienes añoranza de olas, de surf, de snowboard o deportes en los que girara te de la vida, debes probar el longboard. Tú contra tí mismo sobre una tabla larga llena de sensaciones por descubrir. Ideal simplemente para pasear, girar y bajar cuestas frenando con derrapadas… Hay muchos tipos de longboards, cada uno centrado en una variante distinta del deporte.

Parkour, la belleza del movimiento

El parkour es el arte del desplazamiento. La belleza del movimiento y el juego con la gravedad son los componentes que definen a este deporte (e incluso filosofía). La regla principal es conseguir desplazarse de un punto a otro de la forma más fluida posible, utilizando únicamente tus habilidades físicas. Hay que sortear obstáculos, pasar vallas, subir muros, saltar y aterrizar correctamente.

Es un deporte muy técnico e impresionante visualmente hablando. Desde que lo pruebas no puedes volver a pasar un obstáculo bordeándolo. Sientes la necesidad de hacer parkour o aplicar alguna técnica del deporte para pasarlo. Requiere un mínimo de condición física, aunque como deporte urbano, tiene rutinas de entrenamiento propias en la calle. Bueno, bonito y barato.

Hockey sobre patines, un punto distinto de competición

La experiencia del juego en equipo vivida de una forma diferente. Hay competición, portería, disco, equipo rival… se puede practicar de muchas variantes, pero el hockey sobre patines es especial. El control de los movimientos, las posibilidades de sortear a tus rivales y el juego del disco sobre tu palo o hacen especial.

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