Tecnología y futuro. Dos conceptos que cuando se juntan en la misma frase siempre nos depara gadgets de lo más alucinante. Una de esas tendencias son las impresoras 3D. Tras años imprimiendo hojas de papel con informes, gráficas y fotos es hora de pasarse al plástico.

El límite lo ponemos nosotros: podremos replicar y construir todo tipo de objetos: muebles, carcasas para el móvil, herramientas… Tan sólo necesitamos meter un trozo de plástico o madera en uno de estos cacharros, descargarnos un archivo con el modelo en 3D y dale al botón de imprimir.

Esto era el futuro que nos prometían, ¿os acordáis de aquella campaña antipiratería de Estados Unidos que decía que no nos descargaríamos un coche? Parece que dentro de unos años lo podremos hacer, pieza a pieza y luego montarlo como un manitas. Señores, vayan ahorrando y haciendo hueco a una de estas maravillas.

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