A principios del año que viene llega a nuestras pantallas ‘El lobo de Wall Street’ (‘The Wolf of Wall Street’, 2013), la última película de Martin Scorsese, una historia basada en hechos reales acaecidos a mediados de los noventa sobre un broker que alcanzó la gloria para después pisar el lodo debido a su implicación en casos de corrupción y crímenes varios. Una vez más Leonardo DiCaprio encabeza el reparto de un film de Scorsese —Marty para los amigos—, en el que también hacen acto de presencia Matthew McConaughey, Jonah Hill, Jean Dujardin, Spike Jonze y Rob Reiner. De nuevo una muestra de los buenos repartos que se casca este gran director.

Antes de convertir a DiCaprio —quien en sus colaboraciones con el director parece perseguir su anhelado Oscar— en su actor fetiche, lo fue durante muchos años Robert De Niro, quien ahora parece metido en otro tipo de producciones. Suyos son el taxista más famoso del celuloide, Travis Bickle, o Jake LaMotta en ‘Toro salvaje’ (‘Ranging Bull’, 1980). El estupendo Harvey Keitel fue también otro de sus actores más comunes, realizando un peculiar Judas en la excelente ‘La última tentación de Cristo’ (‘The Last Temptation of Christ’, 1988), una película que me parece mucho más creíble que la versión oficial. Si retrocedemos en el tiempo, ya en su ópera prima Scorsese contó con un actor de la talla de John Carradine, y le dio la oportunidad a Ellen Burstyn de ganar un Oscar en ‘Alicia ya no vive aquí’ (‘Alice Doesn’t Live Here Anymore’, 1974). Liza Minelli canta en la ciudad de las ciudades, y sólo alguien como Scorsese es capaz de volver serio a Jerry Lewis.

Daniel Day-Lewis, el único actor de la historia que tiene tres Oscars en la categoría de actor principal realiza dos sentidas e intensas interpretaciones a las órdenes de Marty, en una con ese ángel llamado Michelle Pfeiffer y en otra con Cameron Diaz, John C. Reilly, DiCaprio y Liam Neeson. En otros films Griffin Dunne pasa una noche de locura, Paul Newman tras recibir un Oscar honorífico gana otro al mejor actor por una secuela al lado de un Tom Cruise que casi siempre supo rodearse de buenos directores. Joe Pesci da el discurso más corto de la historia de la estatuilla dorada por un film con Marty, y Nick Nolte, Jessica Lange y Nicolas Cage son otras estrellas que se pasean por su cine.

Sharon Stone consigue una de sus mejores interpretaciones cuando le dirige Scorsese, lo mismo que Cate Blanchett, o Mark Wahlberg, lo cual puede considerase casi un milagro, el que sucede en un peliculón, que es un remake, en el que además salen Jack Nicholson, Matt Damon, Alec Baldwin, Martin Sheen y Vera Farmiga. Un reparto otra vez espectacular y por fin Scorsese consigue su ansiado Oscar al mejor director. ‘Shutter Island’ (id, 2010) es de lo que menos me gusta de él pero el elenco se las trae, y en ‘La invención de Hugo’ (‘Hugo’, 2011) el adulto Marty demuestra que puede hablarle a un niño, inteligente, claro, de tú a tú. En ella aparece una leyenda como Christopher Lee.

Scorsese es un gran director de actores, capaz de hacer que los grandes se luzcan o arrancar buenas interpretaciones de los mediocres; de todos sus proyectos se me cae la baba al pensar en su acariciado biopic ‘Sinatra’ y su posible elenco.

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