Experiencias míticas

Coches y televisión, los destrozos más dolorosos

Rowan Atkinson, el británico que ha pagado la reparación más cara: 1.2 millones de euros.

Rowan Atkinson, el británico que ha pagado la reparación más cara: 1.2 millones de euros por su McLaren F1.

¿Te has parado a pensar alguna vez el trabajo que hay detrás de programas como Top Gear? Lo primero que nos pasa por la cabeza es la vidorra que llevan sus presentadores, Jeremy Clarkson, James May y Richard Hammond. Sus colecciones de coches, los días conduciendo los mejores deportivos sin necesidad de pagar ni un duro. Absolutamente despreocupados del coste y concentrados en las sensaciones. Viajes, rutas de ensueño etc… Aparentemente la vida del periodista del motor es un camino de alegrías, gloria y fajos de billetes. Sin embargo, quedarnos con esa idea sería tremendamente injusta, ¿has pensado en los peligros que se corren haciendo de un coche tu oficina? Hoy vamos a recopilar algunos de los destrozos más dolorosos que hemos visto en televisión.

Para entrar en materia vamos a recordar en primer lugar el accidente más grave que se ha visto durante décadas de Top Gear. Richard Hammond se disponía a correr su tercera carrera del día con un coche de drag capaz de producir 10.000cv. Acelera sin contemplaciones por la pista hasta superar los 400km/h cuando el neumático delantero-derecho revienta… aunque uno de los paracaídas se despliega el bólido se desplaza fuera de la pista donde da varias vueltas hasta detenerse. Richard sufrió lesiones cerebrales de consideración e incluso después de su recuperación aun tenía dificultades para recordar acontecimientos o expresar emociones.

Golpes serios a un lado, la verdad es que los chicos de Top Gear se lo pasan en grande gracias a la manga ancha a la hora de producir cada episodio. En cierta ocasión, allá por 2003, se propusieron el reto de acabar con una Toyota Hilux, la popular pick-up japonesa. Lanzarla al agua salada del océano, tirar una caravana sobre ella o colocarla en la azotea de un bloque a punto de ser demolido fueron algunos de los golpes a los que sobrevivió.



Pero a veces el tortazo no se busca, especialmente si el coche que conducen es un Koenigsegg CCX, un superdeportivo fabricado en fibra de carbono que rondaba los 700.000 euros.

A pesar de todo es innegable que en Top Gear disfrutan destrozando coches. No hay otra forma de explicar el siguiente top 10.

Y a pesar de todo no son los que más se ceban con el destrozo de coches. En Fifth Gear, el show rival por excelencia de Top Gear, tienen su propia sección de crash tests por el que han pasado todo tipo de vehículos distintos. A diferencia del programa de la BBC, aquí se lo toman más en serio y no buscan continuamente la comedia. De hecho, estos test de choques han hecho cambiar de opinión a más de un conductor aficionado a pisar el acelerador.


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Comentarios

  1. Comentario by Carla - enero 24, 2014 02:00 pm

    Ufff, que pena de coches…

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