¿Recuerdas aquellos tiempos en los que el tamaño del móvil importaba?
Para los usuarios de smartphones actuales existe una cierta tendencia que marca que es mejor cuanto más grande sea tu smartphone, da igual si no lo puedes manejar con una mano o si no entra bien en tu bolsillo y puede sufrir cualquier tipo de percance al sentarte.
Hoy día tenemos smartphones de 5 pulgadas y parece que se va a estilar no sólo de estas dimensiones sino aún más grandes, como los Galaxy Note que llegan a las 5.5 pulgadas o bien el nuevo ASUS fonePad Note de 6 pulgadas que comparte diagonal de pantalla con Huawei Ascend Mate, entre otros. Hablamos de un dispositivo a medio camino entre smartphone y tablet que podríamos denominar smartphone con pantalla de tablet o bien tablet de reducido tamaño con conectividad telefónica.
El límite entre smartphone y tablet se ve muy difuminado con los llamados phablets que intentan coger lo mejor de ambos mundos y acaba resultando un dispositivo muy grande como smartphone y bien muy pequeño como tablet quedando en tierra de nadie.
No queremos entrar en polémica, pero, ¿os imagináis a alguien hablando por teléfono con un smartphone de 6 pulgadas? ¡Pero si te tapa más de media cara!. Aún recuerdo los tiempos del modelo Ngage de Nokia que tenías que hablar con el teléfono de lado de manera similar a un plátano, pues con estos dispositivos el chocante efecto óptico es aún mayor.
Hace no muchos años la carrera tecnológica en movilidad estaba en la miniaturización, en hacer dispositivos muy pequeños y finos que no te molesten en el bolsillo y que te permitieran llamar. ¿Recordáis los tiempos del Nokia 5110? Nokia hizo un gran trabajo de miniaturización con los modelos venideros: Nokia 3210, Nokia 3310 para llegar a uno de los más pequeño y elitistas de la época el mítico Nokia 8210.
La competencia tampoco estaba parada y es que en los años siguientes nos encontramos con maravillas tecnológicas como el terminal Motorola V3, ese teléfono con formato de concha realmente pequeño y delgado. Este fue móvil que marcó un punto de inflexión.
Desde entonces comenzamos a disfrutar de la llegada de la tecnología 3G y con ella el consumo de información a través de nuestros terminales de la época. Por aquel entonces los sistemas operativos eran o bien genéricos (JAVA) o bien Symbian o Windows CE / Mobile además de ver los primeros modelos BlackBerry (modelos casi exclusivamente profesionales por la época).
Ese fue el punto en el que cambiaron las tornas y nos encontramos en una carrera de marketing completamente contraria, de pasar a ser el más pequeño el mejor, pasamos a el más grande con más pantalla mejor y pasamos de pantallas de 2,6 pulgadas a smartphones de hoy día que tienen prácticamente esa misma cifra pero al revés, 6 pulgadas.
¿Es que nos hemos vuelto locos? Teléfonos tan grandes casi no pueden utilizarse sin dos manos, gastan mucha energía debido a su gran pantalla y no aportan nada extra a usuarios que no sean hipermétropes. Sólo que las cosas se ven más grande físicamente hablando, que no en definición.
¿Y tú de quién eres? ¿de teléfonos pequeños o burro grande ande o no ande? ¿Te acuerdas de cual fue tu teléfono más pequeño?.
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