¿Es posible tener curas de eyaculación precoz que sean agradables al mismo tiempo? Darle placer sexual a tu mujer hubiera sido una gran lucha para un hombre que sufre de eyaculación precoz: ¡a veces el sexo termina para el hombre antes de que empiece por la mujer! Esto es especialmente cierto cuando el hombre se está enfocando tanto para prevenir la eyaculación precoz hasta que se olvida de la razón por la que trata la eyaculación precoz, es decir, ¡para complacer a su mujer! Apuesto a que estarías de acuerdo en que ¿de qué sirve curar la eyaculación precoz si al final, no logras darle a tu mujer el placer sexual que ella deseaba?

En este artículo, voy a compartir con usted los secretos de la cura para la eyaculación precoz, que pueden, al mismo tiempo, dar a su mujer el placer sexual inimaginable que ella merece.

Secreto # 1 Consigue su “alta” primero

Los hombres y las mujeres responden de manera muy diferente al sexo. Mientras que los hombres tienden a ir directamente al coito, las mujeres prefieren una acumulación lenta y sensual al sexo con penetración. Es también por eso que los hombres alcanzan el orgasmo mucho más rápido que la mujer. De hecho, la mayoría de los hombres llegan al orgasmo en 2 minutos, mientras que la mayoría de las mujeres toman entre 10 y 15 minutos.

La razón principal por la que tantos hombres eyaculan rápidamente o temprano es porque su glande del pene se estimula demasiado rápido durante la penetración y esto es así incluso cuando sus parejas femeninas no están listas.

Si usted es serio en encontrar curas de eyaculación precoz que puedan darle a su mujer el placer sexual que ella merece al mismo tiempo, enfóquese más en sus necesidades primero. Complacer sus puntos sensuales, de pies a cabeza antes de llegar a sus genitales. Usa tu lengua y tus dedos. Obtener su “alta” y “allí” primero. Cuando sabes que está lista, solo entonces usas tu “arma mortal” (pene) y la envías al “cielo”. ¡Dale el placer sexual con el que solo podría soñar antes de esto!

Secreto # 2 Haz lo correcto después de que ella se despierte

Cuando una mujer está excitada, ella tiende a permanecer en esa fase más tiempo que su hombre. Por lo tanto, al realizar curas de eyaculación precoz que agradan a su mujer al mismo tiempo, no debe alcanzar el orgasmo antes de que lo haga.

En el Secreto # 1, has aprendido la importancia y el “cómo hacer” para despertar primero a tu mujer. El truco ahora reside en que le entregues el estímulo una vez que ella esté allí y cuando la estés penetrando. Cuando la estés penetrando, recuerda estimular su clítoris acariciándola de forma firme y suave con los dedos. Esto le ayudará a mantenerse en una posición excitada y disfrutar del placer por más tiempo.

En este momento, es probable que sienta un ritmo más rápido de su respiración y ritmo cardíaco. Controle su patrón de respiración: nunca lo deje ir mal, ya que acelerará su propio orgasmo. Concéntrese en respirar profundamente, inhale y exhale lentamente. Esto ayudará a relajar su cuerpo y retrasar su eyaculación.

Secreto # 3 Termina rápido una vez que llegue al clímax

Cuando puedes sentir que tu mujer se está acercando a un clímax, es mejor no intentar cambiar tu posición, ritmo, velocidad o intensidad de penetración, ya que eso podría perderla. En esta etapa, lo que puede hacer como parte de la cura de la eyaculación precoz es dejar de concentrarse en las sensaciones de su pene. En su lugar, concéntrese en las otras partes de su cuerpo, como la forma en que sus brazos lo apoyan durante la penetración y cómo se flexionan los músculos abdominales. Esto te dará mayor conciencia y mejor control sobre tu eyaculación. También podrás retrasar mejor la eyaculación.

Los anteriores son los 3 secretos no contados en las curaciones de la eyaculación precoz que pueden ayudar a prevenir la eyaculación precoz y complacer a su mujer al mismo tiempo. Si puede tomarse las cosas con calma como lo que compartí anteriormente y demorar su gratificación para satisfacer a su mujer primero, evitará que su excitación se evapore demasiado rápido y le ayudará a durar mucho más tiempo en la cama.