Experiencias por vivir

El mes de los festivales de cine (y cómo sobrevivir a él)

Encaje de bolillos con la programación

8:30h. Suena el despertador. Ducha rápida. Café y bollo para llevar. Cola. Pelearse por un asiento incómodo en un teatro viejo. 9:00h. Película. 11:00. Cola. Película. 13:00h. Correr a la sala de prensa. Pelearse por un asiento en el que se vea algo. Rueda de prensa. Soportar las preguntas tontas de los periodistas. Correr. 14:30h. Película. Ya comerás; cuando sea. 16:30h. Película. Correr. Película. Cola para conseguir entradas para las secciones especiales del festival. Correr. Película. Dormir. 8:30h. Suena el despertador.

Es la dura vida del festivalero. Y mi mes de felicidad.

Con frecuencia me miran levantando las cejas, incapaces de comprender cómo puedo estar nueve días viendo unas 4-5 películas por jornada en el Festival Internacional de cine de San Sebastián, descansar unos días, y empalmar con otros tantos del Festival de cine fantástico de Sitges. Siempre respondo lo mismo, y es mi consejo principal para cómo enfrentarse a esto sin morir en el intento: un cambio de chip. Cuando arranca un festival de cine, el cerebro queda cubierto por una burbuja; una especie de cúpula a lo ‘Under the dome’, en la que los días se miden por sesiones y las horas por historias nuevas que vivir. El cansancio ataca con frecuencia –y, a veces, gana la batalla- pero el truco está en afrontar el reto con otra perspectiva; sacar energías de la pequeña joya que descubriste el día anterior o de esas estimulantes conversaciones con otros amantes del séptimo arte.

El Festival de Donostia ofrece varias vías de escape en forma de secciones. Retrospectivas temáticas, cine culinario, encuentros con profesionales del sector, entrevistas con invitados, encuentros TCM, ruedas de prensa… Organizarse una agenda variada que no te deje caer en una rutina de estar cada dos horas sentado en el incómodo Teatro Principal (¡menos mal que últimamente hay más sesiones de prensa en el Teatro Victoria Eugenia!). Como aquí se come de guerrilla, aunque sólo dispongas de 10 minutos, sal de tu cabeza. Olvida que acabas de ver un truño o que lo siguiente será enfrentarse a un drama asiático de tres horas. Ve al Juantxo, pide una cerveza y un pincho de tortilla y disfrútalos; ya tendrás tiempo de defender ‘El árbol de la vida’ mientras haces cola con otros periodistas o de maldecir haberte quedado sin entrada para ver de nuevo uno de tus títulos de cine negro favoritos en pantalla grande.

Amanecer en Sitges; Otro plus festivalero, los amaneceres están a la orden del día

Donde San Sebastián tiene ventaja en calidad y variedad de cine o de invitados especiales, el Festival de Sitges posee otras que lo convierten en más llevadero. Para sobrevivir, solo hay que abrazar las ganas de pasarlo bien; el ambiente de cachondeo, la Zombie Walk, las risas en las películas malas, las sesiones de cine asiático loco de medianoche o esos maratones imposibles de las 3 de la madrugada. Y como el veranillo de San Miguel suele caer por en medio, un par de mañanas de desconexión y playa son más que posibles. De hecho, tanto San Sebastián como Sitges son dos ciudades preciosas que ofrecen innumerables rincones por donde perderse y desconectar.

Pero voy a acabar con el consejo definitivo: cread un blog. Si de verdad queréis asistir a Festivales de Cine con libertad, un pase de prensa os abre las puertas a todas las posibilidades por un precio ridículo y con opción de ir un poco más allá que ver películas. Sitges es algo más exigente que San Sebastian a este respecto (ya que es un festival de público –y no de prensa- cuyas entradas son exageradamente caras), y actualmente hay tanto contenido en internet que es más difícil destacar, pero si mantenéis un blog más o menos actualizado y que entre bien por los ojos con un solo vistazo a la página principal, no os costará demasiado que os lo concedan. Y si aún sois burocráticamente jóvenes, ambos festivales tienen una opción MUY recomendable para asistir como jurado joven, título que te da derecho a algunos extras gratuitos (comida o alojamiento en el caso de Sitges) y el poder de votar en categorías competitivas. La del Jurado Joven es una experiencia que todo adicto a los festivales debería vivir una vez.

Festival Internacional de Cine de San Sebastián: 20 al 28 de septiembre.
Festival Internacional de Cine Fantástico de Cataluña: 11 al 20 de Octubre.

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Comentarios

  1. Comentario by Hay más cine ahí fuera (16-22 de septiembre) | TodoMdP - septiembre 23, 2013 01:35 am

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  2. Comentario by Películas del Cine | Las mejores peliculas » Hay más cine ahí fuera (16-22 de septiembre) - septiembre 23, 2013 02:49 am

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