Si todo va bien, mañana mismo contaremos con la presentación oficial y totalmente inesperada del nuevo ‘Call of Duty’ (al parecer podría llamarse ‘Call of Duty’: Ghosts’). Porque esto es algo que nos pilla a todos completamente por sorpresa. Nadie podría haberse imaginado ni por un segundo que Activision tuviera pensado lanzar una nueva entrega de la saga este año. Nadie. Pero así es, queridos amigos del píxel, los polígonos y las texturas, un nuevo COD verá la luz casi con toda probabilidad el próximo mes de noviembre.

Se podría decir que la saga ‘Call of Duty’ es tan amada como odiada, pero no lo diré (aunque lo haya dicho para decir que no quiero decirlo). Es muy odiada. Mucho. Es hablar de ‘Call of Duty’ y empezar a ver la espuma saliendo por la boca de muchos jugadores hartos de que cada año venga Activision a forrarse con lo mismo una y otra vez. Es como cuando sale un nuevo ‘FIFA’, ¿no? Lo acaba petando en ventas cosa mala cada doce meses, pero no dejamos de oír cosas como “ya podrían lanzar actualizaciones y dejar de robarnos cada año con una nueva entrega a 70 euros”. Como si alguien nos obligara a comprar, ¿eh?

¿Por qué ‘Call of Duty’ es una franquicia capaz de generar semejante polarización? Ese odio en los blogs y foros es comparable a la cantidad de millones de dólares que recauda cada maldita entrega incluso en su primera semana de vida. ¿Por qué? Que me parta un rayo si lo sé con exactitud. Por la rabia que demuestran abiertamente los que están frontalmente en contra podría tratarse de algo relacionado con el tipo de juego que ofrece esta saga en comparación, sobre todo, con la propuesta mucho más realista que encontramos en ‘Battlefield’. Muchos corren a establecer claramente la línea: ¿juegas a ‘Battlefield’? Eres hardcore. ¿Juegas a ‘Call of Duty’? Eres un noob.

Que sí, que hay mucho campero en el multijugador de los ‘Call of Duty’, que esos camperos merecen la muerte virtual más humillante que seamos capaces de llevar a cabo, que el modo historia es corto —apenas cinco horas por entrega—, que además de corto es pasillero a más no poder y no ofrece rutas alternativas, que hay mucho script, que parece una película de Michael Bay en sus últimas entregas, etc., etc., etc., pero os diré una cosa: ¡viva el ‘Call of Duty’!

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