Si estás un poco al tanto de la actualidad cinematográfica, seguro que sabes que Arnold Schwarzeneger vuelve al cine diez años después (si no contamos los cameos para las dos partes de ‘Los Mercenarios’) a principios de 2013. La peli en cuestión se llama ‘La última decisión’ y viene a ser una especie de remake del clásico ‘Sólo ante el peligro’. Lo sorprendente es que a este Chuache a lo Gary Cooper le hace frente Eduardo Noriega en plan narco psicópata huido. Sí, el mismo Eduardo Noriega que se hizo famoso gracias a papeles de galán sosainas y cuyo tiempo de rompetaquillas y decoracarpetas ya es cosa del pasado. Pero lo cierto es que no es tan extraño, en Hollywood gustan mucho los actores españoles para encarnar a villanos. Será que tenemos cara de malos.

El pionero fue Fernando Rey, que fue reclutado por William Friedkin para interpretar al villano francés Alain Charnier en la celebrada ‘The French Connection’, donde le ponía las cosas muy duras al rudo policía Popeye Doyle (un legendario Gene Hackman). Charnier es uno de esos villanos que siempre aparecen en las listas de los medios estadounidenses y Rey lo volvió a interpretar en la fantástica secuela ‘French Connection II’, dirigida esta vez por el artesano John Frankenheimer.

Hubo que esperar hasta la década pasada para encontrarnos con un nuevo actor español en el rol de villano, en este caso a Jordi Mollá, que se ha convertido con el paso del tiempo en todo un experto en estos papeles. Su papel de camello en ‘Blow’ le abrió las puertas para ser el émulo de Tony Montana, Johnny Tapia, en ‘Dos policías rebeldes 2′ del ínclito Michael Bay. Luego volvió a ser malo malísimo en ‘Knight and Day’, donde le ponía las cosas difíciles a todo un Tom Cruise y en ‘Colombiana’, de la factoría Luc Besson. Y eso no es todo ya que el año que viene lo veremos junto a Vin Diesel en la tercera entrega de las aventuras de Riddick y mucha sorpresa sería que no fuera el malo de la galáctica función. Más encasillado que Michael Landon.

Menos prolífico ha sido Luis Tosar, cuyo encontronazo con el típico villano hollywoodiense se dio una sola vez: siendo un (como no) narco colombiano bastante chungo al que Crockett y Tubbs debían derrotar en el remake que hizo en 2006 Michael Mann de ‘Corrupción en Miami’. Para el recuerdo la coleta guarra de pimp de Colin Farrell y la barbaza bíblica de nuestro amiguete Tosar. Duelo de titanes.

Y, por fin, llegamos al español que más éxito y reconocimiento ha conseguido en Hollywood haciendo de villano, Javier Bardem. El maridísimo de Penélope Cruz debutó en tales lides con un pequeño papel (sí, de narco) en ‘Collateral’ de Michael Mann y luego pudo dar rienda suelta a su pasión por las pelucas en ‘No es país para viejos’, con Oscar al Mejor Actor Secundario incluido, y la reciente ‘Skyfall’, donde se permitía el lujo de desbloquear un logro de la villanía cinematográfica: ser un villano Bond. No sabemos cuales serán sus planes de futuro pero apostamos a que los guiones con papales de malvado para él no paran de llegarle todos los días.

Hasta aquí nuestro repaso a los actores españoles que se han ganado las habichuelas siendo muy malos en Hollywood. ¿Cuál será el siguiente? Ni idea pero teniendo en cuenta la crisis galopante que azota nuestro país y mientras en los iuesei sigan pensando que tenemos cara de malos, no parece una mala salida laboral para nuestros actores. Seguro que se trata de toda una experiencia, ¿no?

Pd: he evitado hablar de Antonio Banderas a posta. Entre las más de 50 pelis que ha realizado en los USA en alguna ha sido malo malísimo (‘Nunca hables con extraños’, por ejemplo) pero es un actor tan asentado en Hollywood, tan parte de la maquinaria que no merecía demasiado la pena hablar de él… oh, wait.

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