El declive de Johnny Depp
Desde los 90, Johnny Depp ha sido uno de esos actores que nos cautivan a todos. Carismático, versátil, diferente, a sus fans las volvía locas con pastelazos románticos como ‘Don Juan DeMarco’ (Jeremy Leven, 1994) y a los que buscábamos un intérprete atrevido nos dejaba trabajos tan locos como ‘Miedo y asco en Las Vegas’ (‘Fear and Loathing in Las Vegas’, Terry Gilliam, 1998). Pedimos durante años el reconocimiento del Oscar y aunque todavía no le ha llegado, ya acumula tres nominaciones a la estatuilla, la más reciente por ‘Sweeney Todd, el barbero diabólico de la calle Fleet’ (‘Sweeney Todd: The Demon Barber of Fleet Street’, Tim Burton, 2007), en la que cantaba y cortaba gargantas.
Sin embargo, en los últimos tres años, a partir de los estrenos de la hueca ‘Alicia en el país de las maravillas’ (‘Alice in Wonderland’, T. Burton, 2010) y la desastrosa ‘The Tourist’ (Florian Henckel von Donnersmarck, 2010), la imagen de Depp ha cambiado. Ya no es ese tipo excéntrico, divertido y talentoso que nos sorprendía, ahora es una estrella cansada y aburrida que repite los tics que tuvieron éxito en ‘Piratas del Caribe: La maldición de la Perla Negra’ (‘Pirates of the Caribbean: The Curse of the Black Pearl’, Gore Verbinski, 2003) y sus cuatro secuelas. Jack Sparrow era un gran personaje pero ya en ‘Piratas del Caribe: En mareas misteriosas’ (‘Pirates of the Caribbean: On Stranger Tides’, Rob Marshall, 2011) solo queda la sombra de todas sus virtudes, la versión más tontorrona y cargante.
Tampoco ha ayudado nada que el cineasta al que más se le asocia, su amigo Tim Burton, esté atravesando una etapa de agotamiento creativo, de reciclar y recurrir viejas ideas demasiado gastadas; su última colaboración, la adaptación de ‘Sombras tenebrosas’ (‘Dark Shadows’, 2012), fue un claro tropiezo por parte de ambos. La situación debería empezar a preocuparle porque ‘El llanero solitario’ (‘The Lone Ranger’, G. Verbinski, 2013), estrenada esta semana en España, ha sido uno de los mayores fracasos comerciales de lo que llevamos de año. Parece que la gente se ha cansado del chico del rostro pintado.
Quizá pensando en que se le acaba la suerte, y con la separación de Vanessa Paradis aún reciente, a sus 50 años Johnny Depp reacciona rechazando ‘Black Mass’, porque no podían pagarle 20 millones de dólares, firmando para repetir personaje en ‘Piratas del Caribe 5′ y ‘Alicia en el País de las Maravillas 2′, y hablando de una cercana retirada. ¿Lo damos ya por perdido?
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