Keira Knightley, hubo un tiempo en que vivías en este siglo
Keira Knightley te veo casi todos los días en el cartel del metro y siempre recuerdo cuando no te vestías de menina para hacer un papel, cuando no eras una mujer de época sino una mujer actual, sin disfraces ni tanta épica orgullosa. Esa explosión popular con tu pirata en aquel verano del 2003. ¿Quién era esa mujer que buscaba interpretar a una niña buena de la alta sociedad pero que en verdad tenía cara de pícara? ¿Y dónde estaba Beckham?
De surcar los mares del Caribe en el siglo XVIII has pasado a meterte en la piel de la Lizzy de la novelista Jane Austen, lo bueno es que no te pilló en jet lag con la máquina del tiempo puesto que la película Orgullo y prejuicio de Joe Wright te encontró en dicho siglo con miras de quedarte encajonada entre tanto vestido en forma de campana.
Con el cartel del metro de Anna Karenina la historia no cambia. Joe Wright te ha debido raptar en tales corsés y aunque esta vez por suerte ya has saltado al siglo XIX aún te llevamos dos de ventaja querida Knightley. ¿Qué fue de tu faceta de chica mala en películas como Domino? Vale, era un mojón, ya lo sabías antes de coger el papel pero se te van a atragantar tantas pastitas y tés rancios de hace unos siglos.
Entre tanto pasteleo, tanta comedia con Hugh Grant practicando para un anuncio de gotas para los ojos, tanta feminidad de siglos pasados (con o sin Cronenberg), acabamos recordando esos planos donde tú sí que sabías convertir unos sujetadores deportivos en algo sexy.
Querías ser como David Beckham y acabaste convertida en una muñeca de porcelana con cardados para un público de novela rosa debajo del colchón. Ais Keira.
En 1001 Experiencias | Emilia Clarke, lo único malo que tiene es ‘Juego de Tronos’
En 1001 Experiencias | Alana Blanchard, talento y belleza sobre una tabla de surf
COMENTARIOS
1