Una vuelta al mundo con Alicia Sornosa
Hoy he entrado en isla neoyorkina de Manhattan. Eso supone haber terminado la vuelta al mundo en moto. Y lo he hecho junto a Alicia Sornosa. O sea, completamos la circunnavegación overland del planeta juntos, tal y como la empezamos en septiembre del 2011 cuando salimos del evento BMW Riders de 2011 en Formigal. Tras acompañarme para culminar en Alaska mi proyecto personal, la Ruta Exploradores Olvidados (REO), a Alicia le quedaba pendiente cruzar Norteamérica para llegar al extremo continental y convertirse en la primera española en rodear la Tierra en su propia moto.
Los viajes en motocicleta son sinónimo de libertad. Libertad de salir, de parar, de seguir o de desviarse. Libertad de juntarse, de separarse y de reencontrarse. Y esto es lo que hemos hecho los que somos únicos protagonistas de esta aventura. Dos BMW. Miquel y Alicia, Alicia y Miquel. Por separado o juntos, no hemos dejado de sorprender a nuestros seguidores, de conmover a los lectores y de trabajar como mulas. De los miles de kilómetros recorridos a lo largo del último año queda un impresionante legado de reportajes, fotografías y vídeos que permiten documentar los cinco continentes.
Decir que nos ha pasado de todo sería verdad pero sería quedarse corto. La aventura comenzó en Alejandría. Egipto, Sudán, Etiopia y Kenia ofrecieron el colorido africano. De Nairobi volamos a Bombay. Tras cruzar de costa a costa el caos circulatorio de la India, separamos nuestros caminos en Madrás. Alicia embarcó hacia Australia y yo me dirigí por tierra hasta Nepal. Tailandia, Malasia, Indonesia fueron los pasos previos para convertirme en el primer español en llegar a Filipinas en moto. Por su parte, Alicia aprendía a manejarse sola en Oceanía recorriendo el suroeste de la Terra Australis y la Isla de Tasmania. De Melbourne voló a Los Ángeles y puso rumbo hacia Vancouver.
Allí llegué desde Manila y me encontré con una viajera curtida que no se arredró a la hora de viajar sola hasta Alaska mientras yo atendía compromisos en Canadá. Reencontrados en el pequeño pueblo de Tok, emprendimos juntos de nuevo la que sería la gran aventura americana: llegar a Inuvik, en el Círculo Polar Ártico, tras recorrer de ida y vuelta una pista de grava de más de 700 kilómetros. Tras eso, Valdez, donde se completó la Ruta Exploradores Olvidados junto a otros dos viajeros españoles: Domingo Ortego y Fernando Quemada. Con los deberes hechos, tocaba emprender el largo camino al Este.
Unas veces juntos y otras separados, fuimos quemando etapas: Sturgis, Chicago, Toronto… y finalmente, Nueva York, la capital del mundo, perfecta metáfora del logro conseguido. Desde la Gran Manzana, ambos volaremos a España para atender nuestros respectivos compromisos, entre los que destacan el recibimiento que me han preparado a Miquel en Tres Cantos para el 15 de septiembre y la intervención de Alicia Sornosa en el Evento BMW Riders 2012 de Formigal donde se proyectarán sendos documentales: uno será el resumen del histórico viaje de la primera española en completar la vuelta al mundo y el otro el apoteósico culmen de la REO.
Pero esto no será el final de sus caminos pues ambos pondremos proa a Sudamérica para iniciar una nueva aventura. ¿Juntos o separados? El destino lo decidirá porque los viajes en moto son sinónimos de libertad. De libertad de arrancar, de parar, de juntarse o de separarse. Sea como sea, te seguro que será tan interesante seguirnos en nuestra ruta panamericana como lo ha sido hacerlo en esta vuelta al mundo.
Trailer de Valdez, final Ruta Exploradores Olvidados.
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