El título de “la carrera más dura del mundo” no es fácil de sustentar, cada día tiene nuevas pruebas frente a las que hacer frente. En 1001 Experiencias la duda está servida entre la Self-Transcendence 3.100 Mile Race, el Spartan Death Race y la de hoy: la Ultramaratón Badwater. Tres pruebas dignas de auténticos aventureros que no conocen ningún límite, y si lo conocen buscan superarlos jugándose su salud por el camino. Y es que la prueba de hoy llega a hacerse a 49 °C a la sombra, con 217 kilómetros a la espalda. Un buen demente extremo lo verá como un reto a batir más que como una advertencia a quedarse en su casa tapado con la manta. Un aplauso para esos locos que aún quedan vivos.

De locos aventureros a deportistas organizados

La Ultramaratón Badwater no fue una competición organizada oficial hasta 1987, atrás quedaban nombres como el de Stan Rodefer, Jim Burnworth, Al Arnold y Jay Birmingham. Todos ellos fueron los primeros aventureros que se decidieron a batir unas marcas para las que el cuerpo no está acostumbrado.

Tanto es así que Al Arnold fue el primero en intentar superar la ruta que ahora mismo sigue manteniéndose vigente pero tuvo que hacer frente a múltiples obstáculos, tanto de lesiones como inclemencias climáticas que le llevaron a una peligrosa deshidratación severa para la cual buscó un método de preparación alternativa en una sauna. En 1977 lograría pasar a la historia de dicha prueba completándola tras 80 horas de carrera.

217 kilómetros antes de caer rendido

Casi la misma distancia que separa en coche Madrid y Albacete (más unos pocos kilómetros). 270 kilómetros en total. La cifra no es algo trivial ni para tomarse a broma. Si a esto le añadimos los 55 grados centígrados que podríamos alcanzar como máxima a pleno sol entonces bien podríamos echar cuentas de cuánto agua tenemos en nuestras reservas corporales. Ese 70 % se nos va a quedar corto.

Badwater es el punto de inicio. El mismo donde se encuentra la famosa cuenca Badwater. La carrera comienza en una depresión hasta llegar al monte Whitney a una altura de 2.533 metros. No salimos de California. Bastante tenemos con superar durante el camino subidas durante más de 3.962 metros con ascensos al mismo tiempo que bajaremos durante 1.433 metros. Pan comido, vaya.

La carrera comienza a las 6 de la mañana y acaba 48 horas después de que entre el grupo de cabeza. El récord lo ostenta un brasileño, Valmir Nunes, con la generosa cifra de 22 horas y 51 minutos. Mientras que en la parte femenina una estadounidense, Jaime Donaldson, estableció la marca en 26:16:12 segundos.

Si el próximo 2013 decides apuntarte avísanos que te daremos un sonoro aplauso.

Sitio oficial | Badwater
En 1001 Experiencias | Peregrino en moto a Cabo Norte
En 1001 Experiencias | Café Racer, una manera de vivir la moto