Son tantas las actividades, deportes o diversiones que se pueden hacer con una tabla que ni siquiera a día de hoy podemos atrevernos a decir que todo sobre una tabla ya está inventado. Probablemente nunca hayas escuchado hablar de sandboarding o sandskiing, pero es el equivalente a la nieve y al invierno en los terrenos áridos, rodeados de dunas y temperaturas que no dan tregua. Ah, y por supuesto, sin remontes. ¿Te apetece surfear la arena?

Quizás los más cercanos a la nieve tenemos escrito en el carácter la necesidad de ser remontados por una pista, de unos servicios auxiliares que nos pisen las pistas o nos inniven zonas cuando la climatología no acompañe las condiciones perfectas para cualquier temporada. Quizás con el paso de los años nos hemos vuelto demasiado exigentes a la hora de buscar adrenalina sobre una tabla cuando tenemos otras interesantes opciones como el longboard o algo que se parece bastante al snowboard: el sandboard.

Adrenalina: mismo código genético para todos los deportes extremos

El sandboard comparte las técnicas de tracción del snowboard y también te permite desarrollar tu propio estilo. Las tablas son ligeramente diferentes y llevan fijaciones que sujetan tu cuerpo a la superficie. Algunos sandboarders también utilizan tablas de snow para practicar el deporte.

Las pistas y las palas son sustituidas aquí por dunas. Enormes dunas de arena como las que se pueden encontrar en en Dubai, Sudáfrica, Argentina, Chile y una gran parte de Sudamérica. Pero sobre todas ellas destaca Perú, en donde yace la Duna Grande en Nazca, una enorme duna que tiene 924 metros de altitud desde su base, alcanzando los 1693 msnm en su cima. Tiene dos caídas formadas por un 100% de arena: una bajada de 700 metros y otra de 1 Km.

Old School: Volviendo a los inicios

El Sandboard no es nada nuevo. Como en los buenos deportes extremos, el tiempo ha heredado el estilo de los pioneros y la esencia permanece a lo largo de los años. En sus primeros pasos, el deporte no fue reconocido como tal hasta que no apareció al menos el nombre de algún inventor, aunque las primeras actividades surgieron en la década de los 40. Pero no fue hasta 1960 cuando el sandboard comenzó a sonar fuerte mientras intentaba hacer comparaciones con su hermano, el snowboard, que se popularizaba cada vez más por esa época.

Sin embargo, el sandboard se popularizó por tres factores principales: la falta de dunas, lo arduo de sus destinos (no suelen ser primeros destinos turísticos) y la falta de promoción, nadie se interesó en el sandboard. ¿Subirías a una duna enorme una y otra vez en busca de adrenalina o mejor esperar a la temporada de invierno y comprar un forfait para unos remontes?

No obstante, quedó constancia de que algunas de las grandes estrellas no se lo pasaron precisamente mal con el deporte. Y si no, mirad a Marilyn Monroe, aunque por cuestiones profesionales, parece que ella era más de sandskiing:

Y su remonte particular…

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